Compensación de emisiones
La compensación de emisiones de carbono es un mecanismo mediante el cual individuos, empresas o gobiernos equilibran sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) financiando proyectos que reducen, capturan o evitan una cantidad equivalente de emisiones en otro lugar.
¿Cómo funciona?
- Cálculo de la huella de carbono: Se cuantifican las emisiones generadas por una actividad, proceso o producto.
- Reducción de emisiones: Se aplican medidas para reducir emisiones en origen (por ejemplo, eficiencia energética).
- Compensación de emisiones residuales: Las emisiones que no pueden evitarse se compensan adquiriendo créditos de carbono, donde 1 crédito equivale a 1 tonelada métrica de CO2 evitada o eliminada.
Tipos de proyectos de compensación:
- Energías renovables: Sustituyen fuentes fósiles por solar, eólica o hidroeléctrica.
- Reforestación y forestación: Restauran ecosistemas que actúan como sumideros naturales de carbono.
- Eficiencia energética: Reducen el consumo energético en sectores como la industria o la vivienda.
- Captura y almacenamiento de carbono (CAC): Extraen CO2 de fuentes emisoras o directamente del aire.
Mercados de carbono:
- Mercado regulado: Vinculado a acuerdos internacionales como el Protocolo de Kioto o el Acuerdo de París.
- Mercado voluntario: Permite a empresas o particulares compensar emisiones por iniciativa propia, como parte de su estrategia de sostenibilidad.
Consideraciones clave:
- La compensación no debe sustituir las acciones de reducción directa.
- Es fundamental que los proyectos sean verificables, adicionales y permanentes.
- La COP29 impulsó estándares globales para garantizar transparencia y eficacia en el mercado de créditos.
En airCO2 te ayudamos a calcular tu huella, reducir tus emisiones y compensar con proyectos verificados.